Esta Real Archicofradía, puede preciarse de tener como titulares y patronos de la Ciudad de Baeza a la Virgen María, bajo la advocación del Alcázar, que en palabras de San Juan Pablo II “es la primera cristiana que nos lleva y nos acerca más a Cristo” y al Apóstol San Andrés que fue el primero, junto a su hermano Pedro, que “dejando las redes” siguió al Maestro.
Parece ser que Baeza, siempre ha tenido a gala estar en primera línea en el amor a la Madre de Dios. Desde el Siglo XIII venera y da culto a Santa María del Alcázar, devoción que ha llegado hasta nuestros días y ha dado frutos extraordinarios a lo largo de la historia. No podemos olvidar que la Universidad de Baeza en 1618 proclamó solemnemente el juramento en defensa de la Inmaculada Concepción de la Virgen María y varios años antes, en 1582, un hijo ilustre de Baeza, Diego Pérez de Valdivia, discípulo predilecto de San Juan de Ávila, publicó en Barcelona el primer tratado teológico en castellano sobre la Inmaculada.
Ahora en el siglo XXI, cuando parece el que el mundo se aleja de Dios y la fe de muchos cristianos languidece, la Real Archicofradía de Santa María del Alcázar y San Andrés, quiere congregar a todos los habitantes de Baeza bajo el manto protector de la Virgen, para que ellos, como siempre ha sido, sean los primeros a imitación de San Andrés, en seguir a Cristo y proclamar al mundo que tenemos una Madre, madre de misericordia que siempre nos atiende en nuestras necesidades y a la que nosotros amamos e invocamos con el título glorioso de Santa María del Alcázar.
Catalina Garrido Garrido.